Cloudbeds ha presentado un informe de las tendencias de viaje de 2022. En él analiza cómo han cambiado los hábitos de reserva de los viajeros durante la pandemia de la COVID-19. Principalmente, este estudio va dirigido a propietarios de alojamientos para que puedan adaptar su estrategia a estas nuevas tendencias. Las principales conclusiones que extrae son un entorno de demanda más dinámico, el aumento de las reservas directas y el incremento de noches en las estancias. El informe se ha elaborado con fuentes de Expedia, Vrbo, Airbnb, Skiff y de las plataformas de hostelería STR.

La demanda es más dinámica

El cierre de destinos y los cambios de restricciones fronterizas son los motivos que han alterado la demanda del mercado. Ha hecho que la demanda se vuelva más imprevisible e incluso, se han visto modificados factores como la ubicación y la estacionalidad. La principal consecuencia es que el tiempo de reserva se ha reducido. Uno de los datos que extrae el estudio es que ahora, el 79% de los usuarios reservan dentro de los 14 días antes de la fecha de inicio del viaje, mientras que antes lo hacían sólo el 24%.

Otro aspecto determinante a la hora de elegir destino es la flexibilidad de las políticas de cancelación. Según el informe 1 de cada 3 usuarios, reservará en función de las condiciones de anulación. Este hecho, también ha llevado a que los viajeros reserven en simultáneo hasta 3 viajes diferentes, por tener varias opciones en caso de cancelaciones por el cambio de restricciones por coronavirus.

Las reservas directas aumentan

GlobalData realizó una encuesta donde el 39% de los usuarios afirmaba que reservaría directamente al alojamiento mientras que el 17% lo haría a través de una agencia de viajes online o comparadores. El portal de noticias de viajes Skift dice que el 56% de las reservas hoteleras de hoteles independientes venía de canales directos en 2020, frente al 39% de 2019. Según el informe de Cloudbeds, cuando estalló la pandémica y empezaron las cancelaciones, los consumidores se sintieron frustrados por la falta de comunicación de las agencias online y el retraso en los reembolsos.

Se alargan las estancias

La tendencia antes de la pandemia eran las escapadas de fin de semana. Según una encuesta de GlobalData, el 44% de los consumidores han incrementado los viajes de ocio a 7 noches mientras que el 26% lo ha hecho en 10 noches. Por su parte Airbnb ha revelado que las estancias de 28 o más días son las estancias que más crecen.

Seguramente que los hábitos de compra de los consumidores seguirán cambiando en función de los cambios, por eso es clave estar al corriente y para poder adaptarnos a los nuevos tiempos.